27 julio 2007

Tiendas de informática, timos e incompetentes

No se puede confiar en nadie. El caso es que ya podía evitar ir a tiendas de informática, pero a veces resulta más cómodo o más rápido e incluso puede resultar más barato si hay productos de oferta, pero después de mis últimas aventuras, creo que voy a dejar de pasearme.

Hay varias cadenas de informática en España y alguna que otra tienda suelta que suele durar muy poco, aunque hay casos que incluso dominan por ser buenos vendedores, que es lo que ya escasea. Suele ser mejor unirse a una franquicia. Es tan fácil que cualquier inútil puede montarse una tienda, como he comprobado cientos de veces. Unas cadenas suben y otras bajan. Ahora hay una muy extendida en la que diversos absolutos ignorantes de lo que es un componente informático se encuentran en todas partes.

El caso más escandaloso de esta patética cadena con carteles verdes (que no se ni para que me he molestado en ir tantas veces, aunque me viniera de paso) es cuando fui a comprar un par de tonterías: un ratón y no se que más. Me dice que tardará una semana (!). Está aquí al lado, no hay problema. Voy a la semana y nada de lo que había pedido era lo que había pedido o no había existencias, cuando la semana anterior sí había. Se ve que el nivel no llega ni al mínimo, es decir, saber leer. No pido que me miren la referencia del fabricante, que creo que sería lo normal, me basta con que miren el modelo, pero es que ni eso.

Tampoco se puede librar uno de las tiendas sueltas. Hay algunas que ya serían clásicas y venden volúmenes a ciertos clientes. Vas tantos años que acabas sin mirar la factura y te fías del presupuesto de palabra. Pues ahí es cuando la cagas y te la clavan. Es que no te puedes fiar de ningún vendedor, por muchos años que lleves yendo. Precio con IVA que es realmente sin IVA. Vamos, un 16% más de lo acordado. Y después de pagar, por la "política de la empresa" ya no hay reclamación posible. Pues a mí ya no me veréis.

También hay contrapuntos, como una tienda individual que tiene el mejor trato al cliente posible, y el mejor servicio posventa posible, donde nunca he tenido ninguna pega ni he visto que nadie la tenga (siempre hay cola). Vamos, que la política de la empresa está por debajo de otra política: el cliente. Eso que ya no se respeta. Si tratas bien al cliente antes y después, vuelve. Vamos, que a veces aunque me cueste más, prefiero ir allí. Además preinstalan Ubuntu a petición.
Por último hay otra cadena de franquicias naranjita (extranjera parece ser) que empieza a extenderse poco a poco y son neutros. También instalan Ubuntu. Ubuntu está definitivamente de moda.

No hay comentarios: