28 mayo 2009

Bill Gates el filántropo y los portátiles de Zapatero.

Este tipo de noticias encienden la sangre. Le pillan a uno en casa de la familia política, que no conoce el asunto, y queda mal la cara que se pone.
Hace ya tiempo que se oían noticias sobre eso de que se iba a regalar portátiles a los niños de primaria. Por una parte tenemos el asunto de que eso pueda tener algún tipo de utilidad o no: Según unos informes, no iba a servir para nada, y según otros, igual servía para nada bueno. Principalmente el tema está en que, en un momento de crisis galopante, ponerse a despilfarrar dinero en algo que no es imprescindible en lugar de arreglar cientos de miles de cosas que no funcionan en este pais llamado España es un acto cuanto menos inmoral.

Las noticias comentaban que esos ordenadores llevarían instalado Linux. Teniendo en cuenta que muchas regiones españolas llevan proyectos variados de implantación de Linux en sus administraciones (empezando por Extremadura), y cada una tiene su propia distribución y todo, con lo que saben montárselo mínimamente, la experiencia de éstas ayudaría al asunto de cómo montar la paraeta para los nanos, ahorrando dinero. También se ahorrarían millones en licencias de sistemas innecesarios y, ya que se gasta dinero, se podría crear bastante empleo. Pero la cosa se ha empezado a poner turbia. Se empezó a comentar algo de arranques duales: Linux y Windows.

Luego viene la noticia de la visita del mayor filántropo del mundo mundial: Bill Gates. Como todos sabemos, este hombre se desvive por crear el mejor sistema operativo del mundo, el más fácil de usar y el más barato, y lo distribuye libremente para que todos lo disfruten y que pueda haber un ordenador en cada casa.

Para quien no note las ironías y no conozca verdaderamente al personaje comentado, este hombre es un gran comerciante. Puede que el mejor de la historia. Vende humo como nadie, y sabe vender mierda bien decorada. El Vista ha sido un horror como sistema, en el sentido de que representa una involución para lo que debería haber sido, pero bonito es. Me desesperan algunos efectos, y eso que no lo uso, pero las transiciones quedan muy majas. Otras creaciones de la empresa de este señor tienen una presencia muy maja también y están muy asistidas para hacer muchas cosas. Pero en el fondo todo es bastante turbio. El trasfondo de todo ello es atar al que lo usa. Es la prioridad total. Y todos lo defienden como si fuera lo que debe ser. Un día de estos tengo que escribir la trilogía del gregario, consciente o inconsciente:

Muchos conocedores de las flaquezas de los productos de Microsoft, sobre todo los responsables de sistemas, utilizan precisamente ese argumento como el más fuerte para su defensa: Si algo falla, la culpa no es del administrador, es de Windows, es de tal, es de cual, porque es que es de Microsoft. Y claro, a ver quien le replica a Microsoft. Todos reconocen que es normal que falle y todos contentos. Increible pero totalmente cierto. Total, nadie tiene ni idea de nada ni quiere saber.

Zapatero y Bill Gates se entrevistaron y salieron en diversos medios. El asunto era comentar lo de los portátiles para los nenes. Gran idea, decía el Sr. Gates. Nos ha jodido. Signos de dólar se encienden en sus ojos. Si el mismísimo Bill Gates viene a España a comentar el asunto, imaginaros la pasta que significa para su empresa, pero no para hoy, sino la pasta que se garantiza para el futuro. Tener una nueva generación completa que sólo conozca sus productos. Esto es tristísimo y ocurre en mi propia generación, de la gente que llegó tarde a la informática.

Flipo a veces viendo que la gente no conoce nada anterior o distinto al MS Office. No conocen el Wordperfect y no les suena ni remotamente el Lotus 123. Y ya había cosas anteriores. Llaman a una hoja de cálculo un excel, y un documento de texto, un word. Y que sólo conocen el XP. No hubo nada antes, ni durante. No hay nada más. Un ordenador tiene una barra azul en la pantalla (o negra desde hace poco) y se editan textos con el word. Eso es lo que quiere Microsoft que perdure, que incluso podría regalar los portátiles para los niños para tal fin. Le resultaría barato. Muy barato.

Lo más grave de todo es que la administración pública decida unilateralmente, como parece que ocurrirá, sin concurso previo, sin informes de ningún tipo, usar Windows en esos equipos. La razón no es la que dicen muchos, que "es el sistema que hay" y es lo que toca. Hay otros sistemas, y mejores, que significan progreso. Significan ahorro. Significan Empleo, desarrollo, etc. Significan futuro. Y todo eso se va a ir en forma de dinero fresco para Redmond. Y seguirá el estancamiento y la dependencia tecnológica absoluta. Y todo esto sin pensar mal. Pensando mal diría que puede haber indicios de delito, que alguien se lleva pasta. Ya se cometen graves irregularidades en ese sentido en multitud de Ayuntamientos, pero a nadie le importa. Es mejor desviar la atención en temas tan importantes y de gran progreso como los carteles de las obras municipales.